Realizar un buen mantenimiento de una piscina no solo implica una buena limpieza del vaso o del control del pH, también requiere que los equipos que la mantienen en funcionamiento trabajen al máximo rendimiento.

Limpiafondos, cloradores salinos y bombas son dispositivos que operan de forma continua y en condiciones exigentes como humedad constante, productos químicos, residuos orgánicos y horas de exposición solar. Por las razones comentadas cuando llega el momento de reemplazar una pieza, elegir recambios originales del fabricante marca una gran diferencia en su rendimiento y durabilidad.

Un mantenimiento adecuado de limpiafondos, cloradores y bombas de piscina

Cada dispositivo que interviene en el cuidado de la piscina está compuesto por elementos que, con el uso continuado, sufren un desgaste inevitable por lo que es recomendable realizar un mantenimiento para reemplazar aquellos componentes que estén desgastados o deteriorados y así evitar averías mayores.

En el caso de los limpiafondos, los cepillos, las ruedas o los filtros trabajan directamente sobre la superficie y acumulan suciedad, lo que acelera su deterioro. En los cloradores salinos, las células electrolíticas tienen una vida útil limitada debido al proceso químico de electrólisis. Las bombas, por su parte, son especialmente sensibles al desgaste de juntas, rodamientos o impulsores por la presión del agua y la humedad constante.

El uso de recambios originales garantiza que cada componente mantenga la eficiencia con la que fue diseñado. Estas piezas están fabricadas específicamente para cada modelo, asegurando un funcionamiento fluido y evitando sobresfuerzos que podrían generar fallos prematuros.

Ventajas al elegir recambios originales

Los recambios originales cumplen con los estándares técnicos que marca el fabricante, lo que asegura una compatibilidad total. Una pieza genérica puede encajar con dificultad, generar vibraciones, pérdidas de presión o un funcionamiento irregular que afecte al resto del equipo.

Un recambio no certificado puede provocar sobrecalentamientos, fugas o incluso cortocircuitos. Los recambios oficiales están sometidos a rigurosos controles de calidad y pruebas de seguridad para evitar este tipo de riesgos.

Aunque a primera vista puedan parecer más caros, los recambios originales reducen la posibilidad de averías, aumentan la vida útil del equipo y disminuyen los consumos eléctricos y químicos.

La garantía del fabricante marca la diferencia

Los recambios oficiales mantienen intactas las prestaciones del equipo y, en muchos casos, permiten conservar la garantía del fabricante. Utilizar piezas no homologadas puede anularla o dificultar la reparación oficial del dispositivo.

Además, marcas reconocidas de limpiafondos, cloradores y bombas recomiendan expresamente el uso de sus propios repuestos para asegurar que el rendimiento, la seguridad y el consumo se mantengan según las especificaciones de fábrica.